El Glorioso y el Invencible fueron botados en la Habana y no se llamaba así, si no que era: "El Glorioso San Ignacio de Loyola". Reinando Felipe V y después de la Guerra de Sucesión, durante la Guerra del Asiento fueron botados estos barcos y dentro de la reforma de la armada emprendida por el ministro Pariño en los astilleros de la Habana, eran dos Navíos de Línea, en concreto de 70 cañones.
La actividad inglesa en el Atlántico había retrasado su construcción, la Compañía de las Indias Occidentales inglesa presionaba para hacerse con una parte del comercio de los territorios americanos de España y su corona por apoderarse de las riquezas que cruzaban el océano, los ingleses llamaban a los territorios Hispano "The Spanish Mine", su comercio triangular británico de esclavos y azúcar unido a la resistencia española hizo que Inglaterra planteara un geobloqueo en las islas Atlánticas desde el Caribe hasta las Malvinas con la intención de romper la Carrera de Indias, esta estrategia consistió en apoderarse de islas no ocupadas por la Corona Española en el Caribe y hostigar la navegación hacía Cuba, está situación permaneció así durante todo el siglo XVIII.
La Royal Navy en plan corsario acosando y atacando a los navíos españoles o los puertos de la Carrera de Indias hubiera o no guerra declarada, sobre la base de una mejor marina y unos buenos artilleros británicos, aunque a la corta no consiguieron nada práctico, españoles y británicos fueron aliados contra Napoleón y con todo ello se sentenció la independencia de las repúblicas americanas, habían llegado a su madurez, tenían que irse, pero tuvieron el fallo de separarse unas de otras, aplicando el: " Divide que vencerás".
La actividad inglesa en el Atlántico había retrasado su construcción, la Compañía de las Indias Occidentales inglesa presionaba para hacerse con una parte del comercio de los territorios americanos de España y su corona por apoderarse de las riquezas que cruzaban el océano, los ingleses llamaban a los territorios Hispano "The Spanish Mine", su comercio triangular británico de esclavos y azúcar unido a la resistencia española hizo que Inglaterra planteara un geobloqueo en las islas Atlánticas desde el Caribe hasta las Malvinas con la intención de romper la Carrera de Indias, esta estrategia consistió en apoderarse de islas no ocupadas por la Corona Española en el Caribe y hostigar la navegación hacía Cuba, está situación permaneció así durante todo el siglo XVIII.
La Royal Navy en plan corsario acosando y atacando a los navíos españoles o los puertos de la Carrera de Indias hubiera o no guerra declarada, sobre la base de una mejor marina y unos buenos artilleros británicos, aunque a la corta no consiguieron nada práctico, españoles y británicos fueron aliados contra Napoleón y con todo ello se sentenció la independencia de las repúblicas americanas, habían llegado a su madurez, tenían que irse, pero tuvieron el fallo de separarse unas de otras, aplicando el: " Divide que vencerás".
Para entender el acoso a lo hispano es necesario dar a conocer un plan diseñado por el Lord Protector de Inglaterra, según el cual: "El español no es sin más nuestro enemigo por mera casualidad, sino de forma providencial; así lo ha dispuesto Dios con su sabiduría". Cita textual de Cronwell en el Parlamento Inglés, en la exposición del Western Design, según este postulado el citado Lord Protector estaba en contacto directo con el Todo Poderoso y él era su ángel exterminador de hispanos; aquí y allí, o sea un loco peligroso, por eso se rodeo de locos sanguinarios como él, corsarios, piratas y gente sin escrúpulos que mataban, secuestraban y violaban, como Morgan o Barba Negra que eran demonios, no ángeles de su Dios, lo mismo que era Cronwell.
Todo ello, unido a un tráfico de esclavos, que los británicos mantenían desde África gracias a los pactos "Contra Natura" de los puritanos británicos con los católicos portugueses, lo que les permitieron entrar en los territorios que les otorgó el Tratado de Tordesillas con Castilla, unido a los pactos de Luis XIV de Francia con Inglaterra en el Tratado de Utrech, permitiendo el asiento de esclavos negros en territorios de la Corona Española, durante 30 años, desembocaron en la Guerra del Asiento o de la Oreja de Jenkins y en la derrota de la flota británica del almirante Vernon, en Cartagena de Indias, ante la defensa del almirante español Blas de Lezo.
Un ejemplo de aquel acoso británico a lo hispano y la resistencia numantina hispana a esto fue el viaje épico del Glorioso, en 1747 que parte hacia España con cuatro millones de pesos de plata o Reales de a Ocho, correspondientes a la parte de la riqueza del Quinto Real perteneciente a la Corona Española, bajo las ordenes del capitán don Pedro Massía de la Cerda y del capitán de fragata don José de Rojas Recaño y que a la altura de las Azores, donde solían actuar tanto corsarios como británicos, es atacado por barcos con pabellón de la Royal Navy, en este enfrentamiento desmantela al Warwich y al lark, uno de 60 y a la fragata de 44 cañones, cada uno de ellos.
" El Glorioso San Ignacio de Loyola" continua su ruta hacia A Coruña, sin grandes daños que señalar, pero a la altura del Cabo Finisterre se enfrenta a otros tres barcos ingleses un línea de 60 bocas de fuego y dos fragatas, rechazándolas y logrando entrar en la Ría de Corcuvion donde descarga el tesoro transportado el 16 de agosto de 1747..
Habiendo cumplido con éxito su misión se dirige a Cádiz, para iniciar reparaciones por los combates que había tenido, en el Cabo San Vicente tiene un nuevo enfrentamiento con las fragatas que tienen que retirarse destrozadas, siendo perseguido por diez navíos enfrentándose al Russell con 80 cañones y al Dartmuuth de 50, además de dos fragatas, el Darmouth se hundió envuelto en llamas, salvándose solo 14 hombres.
El Glorioso se ve obligado a rendirse al acabársele la munición, teniendo 33 muertos y 130 heridos. El maltrecho navío fue remolcado a Lisboa donde se le reparó, trasladándolo a Londres donde se le subastó entregándolo a particulares.
El comodoro Walker jefe de la escuadra perseguidora en el combate final escribió:
"Continuó la persecución de tan escurridizo, audaz y tenaz enemigo, porqué nunca los españoles habían luchado igual y nadie en realidad han luchado así con un buque". El Glorioso había luchado con el Warwick de 60 cañones, el Larck de 40, el Montagu de 16, el Oxford de 50, el Shoreham de 24, el Falcom de 14, el King George de 32, el Price Frederick de 26, eñ Prince George de 20 y el Darmouth de 50. Fue una actuación heroica y por encima de lo que el deber exigía, Don Pedro Massía de la Cerda cuando fue liberado, fue elevado a la condición de Marqués de Armijo, almirante de escuadra y virrey de Nueva Granada, su tripulación recibida con honores de héroes en España.
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